Al combinar las mejores tradiciones del viejo mundo con la implementación de nuevas tecnologías, el vino se crea en una bodega de última generación y en una moderna bodega de barriles.

La cosecha es tradicional, se realiza recogiendo las uvas a mano, seguida de una meticulosa selección de las frutas. Una vez clasificadas, las uvas se colocan en tanques de acero inoxidable con temperatura regulada.

De acuerdo con el estado de calificación Grand Cru, Château Plaisance envejece el vino en barricas nuevas de roble durante 18 meses. La mezcla artística de las tres variedades de uva es uno de los pasos finales. Dos años después de la cosecha, el vino es embotellado.